Los que utilizan la mentira como forma de vida lo tienen más difícil
El cuento de Pinocho ha dejado de serlo, al menos eso parece. Y esque científicos de la Universidad de Granada, en España, han demostrado científicamente que al mentir, sube la temperatura de la nariz.
No parece que vaya a cambiar mucho la cosa, pero ahora esta prueba científica deja abierta la posibilidad a que, por ejemplo, vayas a hacer una entrevista de trabajo y tengas enfrente una cámara de calor, para saber si lo que dices es cierto o es obra de tu imaginación. Seguir leyendo «El que tenga la nariz roja, miente»